Aniversario 140 nacimiento del arquitecto JUJOL por AMPPARITO
En 2019 el artista AMPPARITO ganó la convocatoria que gestionamos en conjunto con el Ayuntamiento de Sant Joan Despí por la realización de un mural en homenaje al arquitecto Josep Maria Jujol. Esta acción se enmarcó dentro de las actividades en honor al 140 aniversario de su nacimiento y que se produjeron en la ciudad Sant Joan Despí de la cual fue arquitecto municipal muchos años.
La convocatoria tuvo una buena participación nacional e internacional con más de 70 inscritos. El ganador realizaría una residencia artística en la ciudad y pintaría un mural a inaugurar la semana principal de los actos en honor a la figura del arquitecto.
En palabras del artista:
Josep María Jujol se dejó influir por la naturaleza hasta tal punto que se hace patente en todas sus obras. No era un arquitecto al uso, dado que llevaba sus gestos hasta el extremo, ese estilo al dibujar o escribir, una suerte de pendolista del subconsciente, que con un método altamente expresivo cubría toda superficie disponible. su estilo permea de la ornamentación a lo estructural, creando superficies con connotaciones oníricas, como se puede apreciar en las escaleras de Can Negre, en la Casa Mañach o en el teatro Metropol de Tarragona.
Uno de los aspectos que mas llamó mi atención fue su caligrafía, espasmódica, altamente gestual y enigmática, que mantiene la legibilidad en un segundo plano. Las inscripciones de los nombres de sus hijos en la capilla del Can Negre dan fe de ello. Si bien su lectura no resulta evidente, crea un contraste genial con el conjunto de la sala, un barroco exuberante que te engulle y te hace ser parte de la estancia.
Este nervio es también evidente en la forma que diseñaba verjas y puertas, una sinfonía de cortes, deformaciones, plegados y abolladuras. Estos entramados me recuerdan a las ramas de un árbol recién podado, esos espasmos y cambios de sentido son fruto del subconsciente, lo más natural y primigenio. Es imposible realizarlos a través del tamiz de la consciencia, es necesario liberar la mano, escapar del control de la razón. Considero esta conexión altamente significativa, dado que los elementos orgánicos están muy presentes en la toda la obra de Jujol. Probablemente esto sea debido a su carácter religioso, es así que el vínculo con la naturaleza está muy presente, el modo en que los elementos actúan sobre la materia toma un carácter principal. Del mismo modo que el agua y el viento erosiona las rocas, él modela los cantos de elementos arquitectónicos prefabricados para hacerlos suyos, borrando cualquier huella de asepticismo tan característica de la arquitectura moderna del momento (punto de ruptura, exposición 1929, pabellón de Barcelona de Mies van der Rohe VS fuente de la plaza de España, Jujol).
Viendo la propia creación como algo cíclico, que necesita de sustratos de los antiguo, aparentemente inútiles, para ser reorganizado y crear lo nuevo. Así como las plantas necesitan de tiempo, calor, agua, oscuridad, sol y nutrientes (estiércol u otras plantas en descomposición, cenizas, etc.) para desarrollarse, los dos árboles de enfrente del muro han necesitado de todos estos elementos para ser lo que son a día de hoy. Una transformación de esqueje a lo que son hoy y con el paso del tiempo su inexorable desaparición.
Es por ello que me parece significativo anclar este testigo de la naturaleza en el año 2019, el mismo que el 140 aniversario del nacimiento de Jujol. Hacer un retrato de un árbol al lado del propio árbol lo congela en el tiempo, este elemento cotidiano y casual funciona como la desbandada de los patos de la Casa Serra Xaus, como un germen desde el cual empezar a crear.
De esta manera se quieren hacer patente esos elementos de la naturaleza, el paso del tiempo, ese inevitable camino hacia la desaparición a través del desarrollo, de decisiones inconscientes, sucesos vitales, ¿por qué una rama tuerce a la derecha, o al izquierda o se mantiene recta? ¿cómo afecta las decisiones del jardinero que lo poda en su desarrollo? ¿y los edificios que lo rodean dejando que de luz solo en ciertas partes? ¿cómo la alteración del entorno modificará los caminos que siguen sus ramas? Todo ello resulta impredecible, al igual que la gestualidad de Jujol, simplemente encuentra caminos que son fruto de muchas variables de la misma manera que la naturaleza.
Con esta pieza se crea algo que como todo lo que nos rodea, desaparecerá, sospecha de estiércol. ¿qué perecerá antes, el árbol o su retrato del año 2019? Sea como fuere lo que es seguro es que pasará a formar parte de ese sustrato que servirá como base para lo nuevo que vendrá.
Debido a este carácter mutable de la obra, propuse hacer una foto desde los dos puntos de vista elegidos una vez al mes el primer año. Y bianualmente los años restantes (antes y después de podar) para seguir el proceso de cambio del objeto respecto al modelo.